Misión de San Juan Bautista
Ohkay Owingeh, antiguo San Juan Pueblo, Nuevo México Coordenadas: 31.567472,-111.051842 #TravelSpanishMissions Descubra Nuestra Herencia Compartida Itinerario de viaje de las Misiones Coloniales Españolas del Suroeste
A unas 90 millas al norte de Santa Fe, el Pueblo de Ohkay Owingeh, antiguamente conocido como Pueblo de San Juan, está situado en la ribera este del Río Grande. El lugar ha estado habitado desde el 1200 d.C. Curiosamente, la iglesia neo-gótica de piedra y ladrillo de San Juan Bautista, parece estar fuera de lugar al compararla con los edificios de adobe de un piso que la rodean. La iglesia de ladrillo, de hecho, oculta una larga historia de interacción entre españoles e indios Pueblo en Nuevo México. Originariamente, la misión de San Juan Bautista fue fundada como parte del primer asentamiento de Don Juan de Oñate en Nuevo México, que data de 1598.
San Juan de los Caballeros fue la primera capital y asentamiento español en Nuevo México, pero fue ocupada sólo por un breve período de tiempo. A finales de 1599, los colonos se trasladaron a San Gabriel del Yunque-Ouingue –a menos de media milla de distancia–que sirvió como segunda capital de Nuevo México. Once años más tarde, la capital se trasladó de nuevo a la ubicación actual de Santa Fe. Aunque el asentamiento español se trasladó, los sacerdotes franciscanos mantuvieron la misión de San Juan Bautista hasta su secularización en 1826, convirtiéndola en la parroquia católica local. Hoy en día, el pueblo es uno de los Ocho Pueblos Tribales del Norte. Tanto el pueblo de San Juan –renombrado Pueblo Ohkay Owingeh en 2005–como Nuestra Señora de Lourdes de la Gruta –parte de la histórica iglesia de ladrillo que sustituyó a la misión de adobe–figuran en el Registro Nacional de Lugares Históricos.
Ohkay Owingeh
Los habitantes de Ohkay Owingeh son un grupo de habla Tewa que se desplazaron al sur hacia el año 1200 d.C. como parte de la gran migración Pueblo. Establecieron una gran comunidad basada en la agricultura de regadío a lo largo del Río Grande, en un valle entre Sangre de Cristo y las Montañas Jémez. El nombre tradicional del pueblo, Ohkay Owingeh, significa "Pueblo de la gente fuerte", e históricamente era el lugar de las reuniones entre los pueblos. Hoy el pueblo es la sede del Consejo Tribal de los Ocho Pueblos del Norte.
La llegada de la expedición de Oñate
La expedición de Oñate estaba compuesta por soldados, familias y franciscanos, y contaba con rebaños de ovejas, vacas, mulas y caballos, que fueron conducidos hacia el norte en una lenta procesión desde México. Oñate pertenecía a una rica y poderosa familia minera de Zacatecas, y había luchado contra los chichimecas y se había dedicado al desarrollo minero durante la década de 1540. En la década de 1590, estableció un contrato con el Virrey de Ciudad de México para pacificar Nuevo México y convertirse en su gobernador a cambio de préstamos, suministros y soldados. Los españoles estaban interesados en el potencial minero de la región y los franciscanos querían expandir su ministerio más al norte.
Los colonos y el pueblo de Ohkay Owingeh parecían mantener una relación pacífica. La gente del pueblo proporcionó algo de alimento y refugio para el incipiente asentamiento de San Juan de los Caballeros, hasta que los colonos pudieron sembrar y cosechar sus propios cultivos allá por el otoño de 1598. Más tarde en San Gabriel, los colonos construyeron la iglesia de San Miguel (que también aparece en este itinerario) para servir a su comunidad, pero cuando la capital se trasladó a Santa Fe en 1610, se convirtió en la iglesia de la misión para el pueblo, hasta la construcción de San Juan Bautista a una milla de distancia, en 1643.
La Rebelión Pueblo y la reconstrucción
La tensión y el resentimiento crecieron a partir de 1600, a la par de las demandas laborales y de tributo del sistema de encomienda y la supresión de las prácticas religiosas tradicionales de los Pueblo. Po'pay (Popé), un líder religioso de Ohkay Owingeh, fue uno de los principales organizadores de la Rebelión Pueblo de 1680, que dio lugar a la expulsión de los españoles de Nuevo México durante 12 años después de la revuelta. Durante ese período, la iglesia de San Juan Bautista fue probablemente destruida. Cuando regresaron los franciscanos, comenzaron la construcción de una nueva misión más cerca del Pueblo Ohkay Owingeh, edificio que duró cerca de 50 años antes de que hubiera que construir uno nuevo. Alrededor de 1760, la gente del pueblo y Fray Juan José Pérez de Mirabal comenzaron a construir una estrecha iglesia que medía 22 pies de ancho en el interior y 110 pies de largo. La iglesia tenía un único campanario en la fachada y en el interior había un retablo en el altar pintado en colores amarillo, azul y rojo. La iglesia también estaba decorada con pinturas de santos sobre piel de búfalo.
El programa de la misión duró hasta 1826, cuando se secularizó y las tierras pasaron a manos privadas después de la Independencia de México. San Juan Bautista era una iglesia parroquial en el momento en que Nuevo México pasó a estar bajo control de Estados Unidos, tras el Tratado de Guadalupe Hidalgo en 1848. Se reconstruyó el tejado de la iglesia de adobe y se mantuvo a través de la mitad del siglo XIX, pero la llegada de un clérigo francés a la diócesis de Santa Fe anunciaba el cambio para el viejo San Juan Bautista. El padre Camilo, o Camille Seux, vino de Francia a los EE.UU. en 1865 y seis semanas más tarde fue enviado a Santa Fe. Después de servir como aprendiz fue asignado a San Juan Bautista como pastor. Permaneció en la parroquia durante 53 años. Durante este tiempo derribó la antigua iglesia de adobe y para 1912 ya había reconstruido una rectoría de dos pisos, una escuela y una iglesia nueva de estilo neogótico utilizando ladrillos en vez de adobe. La iglesia recibió el nombre de Nuestra Señora de Lourdes, pero volvió a su nombre original de San Juan Bautista.
Lo que se ve hoy en día
Además de la iglesia, que se encuentra en el lugar de la antigua misión, el pueblo histórico consta de bloques paralelos de casas de adobe de uno y de dos pisos, y kivas ceremoniales rectangulares. Hoy en día, San Juan Bautista es una parroquia católica activa que continúa con su ministerio en el pueblo y la comunidad circundante, y cuenta con coros que cantan en tewa y español. El pueblo de Ohkay Owingeh está abierto a los visitantes, ofreciendo alojamiento en el Casino Resort Ohkay y oportunidad de ver artes y artesanías Pueblo. Muy cerca se encuentra el Monumento Histórico Nacional de San Gabriel de Yunque-Ouingue. También cabe destacar la cooperativa de artes y oficios Oke Owinge, un centro de artes bien conocido que muestra la obra de artesanos locales. Asimismo, una réplica de la Misión de San Miguel situada en Española, Nuevo México, al sur de Ohkay Owingeh, y que sirve como Museo de la Misión en la Plaza de Española, puede ayudar a orientar a los visitantes hacia la historia española de la zona.
Planifique su visita
Ohkay Owingeh, formalmente conocido como Pueblo San Juan, está situado a cuatro millas al noreste de Española, Nuevo México, en la NM 68. El Pueblo puede ser visitado todos los días desde el amanecer hasta el anochecer. No se permite el uso de cámaras, grabación o bocetos. Para obtener más información sobre el pueblo, por favor llame a la oficina tribal al 505-852-4400. Para obtener más información acerca de la parroquia, llame al 505-852-4179 o visite la web de la iglesia de San Juan Bautista (San Juan Bautista Catholic Church).